A pesar de las especulaciones sobre una posible cancelación, los aficionados de Newell's Old Boys llevaron a cabo su tradicional banderazo. El equipo dirigido por Mariano Soso no atraviesa un buen momento, habiendo perdido cuatro de sus últimos cinco encuentros. Tras la derrota sufrida ayer frente a Defensa y Justicia, los jugadores abandonaron el campo envueltos en silbidos y bajo la vigilancia de la policía.
Desde las 18 horas de este jueves, el club rojinegro abrió sus puertas a los seguidores, quienes se agruparon en gran número tras el anuncio oficial en redes sociales sobre la realización del banderazo. El plantel profesional, al entrar al terreno de juego, se unió a los cánticos de la hinchada, con la mirada puesta en el crucial partido que se avecina.
Newell's se medirá contra Rosario Central en una nueva edición del clásico rosarino el próximo domingo 16 de febrero a las 17 horas.
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