A raíz de la crecida, tuvieron que cerrar el acceso al recorrido Garganta del Diablo, levantar las barandas y rebatir las pasarelas.
La última vez que ocurrió eso fue el 3 de diciembre del 2015, cuando el caudal superó los 11000 metros cúbicos por segundo, siendo que el nivel habitual es de 1500.
"Se debe fundamentalmente a que está lloviendo mucho en la cuenca alta del río Iguazú, que va hasta la localidad de Curitiba, en Brasil, muy cerca de la costa del Océano Atlántico", explicó ayer el intendente del Parque Nacional Iguazú, Atilio Guzmán.
Según el diario El Territorio, a raíz de la crecida debieron abrir las compuertas de las represas ubicadas aguas arriba del Parque Nacional Iguazú, lo que aumentó aún más el caudal.
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