El Concejo Municipal de Santa Fe ha aprobado una ordenanza que prohíbe la actividad de cuidacoches en la ciudad. Esta normativa, sancionada en la sesión de ayer, suprime la legislación anterior del año 2019, que buscaba regular la labor de estas personas en la calle pero que nunca llegó a implementarse. La prohibición alcanza a quienes trabajan sin tarifa fija y reciben contribuciones solidarias.
El edil de la Unión Cívica Radical, Carlos Suárez, explicó que la iniciativa fue a instancias del Departamento Ejecutivo Municipal, que envió un pedido formal al Concejo para que se derogue la ordenanza Nº 12. 635, del 2019, que tenía como objetivo organizar o sistematizar la actividad. Según Suárez, la actividad de cuidacoches ha ido desbordándose en los últimos años y devino necesario tomar medidas contundentes al respecto.
En declaraciones al programa “El primero de la mañana” de LT8, el legislador destacó que “ya en el año 2019, cuando se aprobó la regulación de los cuidacoches, ya se estaba errando el abordaje del tema. Este era un problema social que no se iba a resolver normativizando o regulando la actividad, más bien se iba a dar una señal equivocada y la situación iba a empeorar. Y así sucedió”. “Hoy tenemos una prohibición específica. Y para que su control sea efectivo, lo ideal sería que un inspector municipal actúe junto con un policía, porque frente a la negativa de una persona de retirarse de hacer una actividad prohibida, la consecuencia inmediata tendría que ser la detención”, agregó.
Sin embargo, el concejal indicó que “la detención se puede dar porque no cumple la orden importada por el personal municipal; también puede ser arrestado si la policía le pide identificarse y esa persona no accede, o si el trapito, además de llevar adelante una actividad prohibida, pueda estar alcoholizado. Es un control complejo porque si fuera por las potestades propias del municipio, el inspector solo podría hacer una multa, y si actúa con un policía la situación cambia”.
Aseguró, asimismo, que “hay un compromiso de trabajo junto con la policía. La Guardia de Seguridad Institucional estará acompañada por policías. Este dispositivo contribuiría mucho en el control. Lo primero que se controlará será la zona que tiene estacionamiento medido para evitar esa suerte de doble imposición que se da porque hay que pagarle al municipio por el estacionamiento medido y al trapito. La actividad está prohibida de manera completa, inclusa de aquellos que la ejercen sin cobrar tarifa fija y reciben dinero a voluntad”.
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