Un joven de 29 años quedó detenido con prisión preventiva por 90 días, al ser acusado de delitos vinculados a la venta ilegal de armas de fuego y de haber amedrentado a su ex pareja.
De acuerdo al fiscal Pablo Socca, el imputado formaba parte de una red de venta clandestina de armamento que se descubrió en febrero luego de la infiltración de investigadores en un grupo de compraventa de WhatsApp donde ofrecían armas sin autorización.
Miguel Suárez, que fue detenido el pasado martes en barrio Las Flores, le había suministrado armas a Facundo Bemay, un joven que las ofrecía en grupos de redes sociales, de acuerdo a la investigación del fiscal Socca.
Cabe recordar que Bermay fue arrestado el 21 de febrero en la esquina de su casa, en Villa Gobernador Gálvez, cuando fue a vender una pistola calibre 40, a un comprador, que terminó siendo un agente encubierto. Tras el procedimiento, secuestraron el arma y las municiones.
El teléfono de Bermay, aportó chats incriminatorios y fotos que sugerían que la reventa de armas era una actividad que frecuentaba seguido entre julio del año pasado y febrero.
La pistola calibre 40 en cuestión, pertenecía a un policía retirado del Comando Radioeléctrico de Rosario, que denunció su pérdida en julio de 2014, pudo confirmarse por el número de serie del arma.
Suárez sostiene en su declaración que esa pistola pertenece a un policía que se la había vendido. Pero, en los chats entre Bermay y Suárez hay imágenes de armas que formaban parte del catálogo a comercializar.
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