Portada  |  24 junio 2025

Condenan a prisión perpetua a Gregorio Brítez por el femicidio de Nora Escobar

El cuerpo de Nora Escobar fue hallado el 10 de mayo de 2022 gracias a la intervención de perros rastreadores.

Rosario y la región

Gregorio Ramón Brítez fue condenado este martes a prisión perpetua por el brutal asesinato de su pareja, Nora Escobar, ocurrido en abril de 2022 en la localidad santafesina de Granadero Baigorria. La sentencia fue dictada de manera unánime por el tribunal conformado por los jueces Gonzalo Fernández Bussy, Mariano Aliau y Valeria Pedrana, al finalizar un juicio que se extendió durante doce días.

El crimen, que conmovió a la comunidad, tuvo lugar el 22 de abril de 2022. Brítez apuñaló a Escobar 18 veces y luego ocultó su cuerpo en un pozo en el patio de la vivienda que compartían. Para intentar borrar rastros del hecho, el acusado recubrió el lugar con una carpeta de concreto, utilizando una hormigonera.

La fiscal del caso, Marisol Fabbro, detalló que el tribunal consideró que las pruebas eran concluyentes. Entre ellas, se destacó el hallazgo en el celular del acusado de búsquedas en Google sobre cómo enterrar un cuerpo. Además, se incorporaron testimonios claves que ayudaron a reconstruir el contexto de violencia de género que precedió al femicidio. “Se acreditó a través de una denuncia previa realizada un año antes, que incluía una orden de restricción que Brítez violó, así como los testimonios de la hija de la víctima y de una expareja del imputado”, precisó Fabbro.

Durante el juicio, Brítez pidió perdón a la familia de Nora, aunque no explicó los motivos de su accionar. Para el tribunal, ese gesto, pese a no implicar una confesión, fue evaluado como un dato relevante.

El cuerpo de Nora Escobar fue hallado el 10 de mayo de 2022 gracias a la intervención de perros rastreadores, que marcaron una zona recientemente cementada en la vivienda ubicada en Liniers al 1700. La investigación se inició tras la denuncia por desaparición realizada por los familiares de la mujer.

Brítez fue detenido al día siguiente en la ciudad de Posadas, Misiones, mientras intentaba cruzar la frontera hacia Paraguay. Su intento de fuga no hizo más que reforzar la sospecha sobre su responsabilidad en el crimen que hoy tiene sentencia firme.

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