Este lunes al atardecer se produjo un violento robo a una tabaquería ubicada en San Juan al 4900: dos delincuentes armados ingresaron de manera abrupta, amenazaron a las dos trabajadoras y a una de ellas la arrojaron al suelo.
Julia, una de las víctimas, relató que fue golpeada con la culata del arma en la cabeza y que los agresores intentaron quitarle un anillo, llegando a amenazarla con cortarle el dedo: “Cortame el dedo pero el anillo no sale”, les respondió.
Según la víctima, los asaltantes actuaron con extrema violencia, la maniataron y le dejaron moretones en la pierna.
Cuando el delincuente se percató de la presencia de las cámaras de seguridad, se cubrió su rostro mientras continuaba robando. Todo quedó registrado por el sistema de videovigilancia del local, que funciona en esa ubicación desde hace solo tres meses.
En medio del forcejeo, la mujer contó que la situación cambió por la inesperada llegada de una clienta: “Santa Angie”, la llamó la comerciante, al recordar que su presencia hizo que los ladrones escaparan. La clienta explicó que percibió el robo al ver la expresión de una de las trabajadoras y que los delincuentes huyeron al notar que ella iba a dar aviso a la policía.
Las víctimas aseguraron que hicieron lo posible por defenderse y que, pese a la amenaza constante de las armas, la reacción de la clienta fue determinante para que no se concretara un robo aún mayor.
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