Inquilinos de una vivienda en zona norte de Rosario llevaron a cabo una fiesta descontrolada: los asistentes, quienes filmaron y subieron a redes sociales los sucesos, realizaron disparos de fuegos artificiales y metieron una moto de agua en la pileta.
Fuentes municipales confirmaron que, a raíz de las denuncias de los vecinos por ruidos molestos, se labraron dos actas en el lugar. Sin embargo, los asistentes impidieron el ingreso de las autoridades, y dado que no se contaba con una orden de allanamiento, no se pudo tomar ninguna otra medida.
De acuerdo al secretario de Control y Convivencia de la Municipalidad de Rosario, Diego Herrera, el viernes recibieron una primera denuncia, una segunda el sábado a las once de la noche y una tercera el domingo a las ocho de la mañana, en todos los casos por ruidos molestos y el uso de pirotecnia dentro del domicilio, ubicada en Herrera entre Álvarez Thomas y Maza.
“De agosto a hoy hubo 24 intervenciones y once infracciones por ruidos molestos que ya se pueden juzgar porque están en rebeldía” comentó el funcionario.
El domicilio ya acumula multas por un valor de 2.500.000 pesos, ya que cada una de las infracciones tiene un costo de entre 30.000 y 40.000 pesos. Además de las actas por ruidos molestos, en una de las intervenciones anteriores a este fin de semana se labró una por obstaculizar un operativo de los agentes de Control.
También comentaron sobre una situación muy conflictiva entre la propietaria del inmueble y el inquilino. Todas las actuaciones, incluidas la del fin de semana y el video que circula, ya fueron derivadas al Tribunal de Faltas.
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