Dos hombres fueron imputados por el robo de una ambulancia en Rosario y la posterior persecución policial que terminó en un country de Funes, donde el vehículo quedó incrustado en la fosa de una pileta en construcción.
El fiscal Federico Rébola acusó este lunes a Roberto Ernesto C. y Walter Ezequiel N. como autores de un “robo con arma cuya aptitud para el disparo no puede tenerse por acreditada en concurso real con resistencia a la autoridad y abuso de armas”. El juez Hernán Postma dispuso la prisión preventiva por el plazo de ley (hasta dos años).
El episodio comenzó el jueves 11 de septiembre alrededor de las 22 en Arijón al 2700, cuando dos hombres abordaron al chofer de un utilitario Renault Kangoo, utilizado como ambulancia por la empresa de emergencias médicas CG&L. Bajo amenazas con un arma de fuego, lo redujeron y se llevaron el vehículo junto con sus pertenencias.
La policía montó un operativo de persecución que se extendió por la Avenida de Circunvalación y la autopista a Córdoba. Finalmente, los ladrones ingresaron al barrio privado Cantegril de Funes, donde realizaron una mala maniobra y terminaron incrustados con la ambulancia en la fosa de una pileta en construcción.
Tras abandonar el vehículo, uno de los sospechosos exhibió un objeto similar a un arma, lo que motivó disparos disuasivos de los uniformados. La búsqueda continuó a pie hasta que, alrededor de las 23.40, fueron hallados escondidos detrás de unas maderas.
Walter N. forcejeó con una oficial de 38 años en un intento de arrebatarle el arma. En la secuencia la funcionaria resultó herida con un disparo en la cadera con orificio de entrada y salida. Fue trasladada al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), donde se constató que la lesión no revestía gravedad y recibió el alta pocas horas después. Los dos hombres quedaron finalmente detenidos a disposición del MPA. La ambulancia, en tanto, fue retirada con una grúa al día siguiente.
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