Saltaron el tapial, forzaron una ventana de vidrio y se llevaron más de un millón de pesos. El golpe fue fugaz y muy doloroso para la comunidad de la Parroquia Santísimo Redentor, en Gallini al 1100.
El dinero estaba guardado para obras en el colegio y el Centro de Día que colabora con chicos de escasos recursos de barrio Arroyito Oeste.
Los ladrones, según la policía, actuaron con guantes ya que no dejaron marcas sobre el blindex violentado. El dinero se había juntado durante años con el aporte de los fieles.
“Es todo lo que se fue juntando durante mucho tiempo, y ahora por la inflación para hacer cualquier cosa, sale mucha plata. Ahora a levantarse y seguir trabajando”, comentó a Telefe Noticias el Sacerdote Lucas Policardo.
La droga es un flagelo que arrebata el futuro de todas las comunidades... Y ésta capilla funciona como un espacio para sacar a chicos de la calle y otorgarle oportunidades. El sacerdote, lejos de bajar los brazos dijo que es momento de seguir adelante y pugnar por una sociedad más comprometida y con oportunidades.
“Hay que hacer el bien sin mirar a quién. Droga se ve, y el que no la ve es porque no quiere. A las cosas hay que hablarlas y enfrentarlas. Y aunque nos quieran vender buzones, la realidad es muy dolorosa y hay que transformarla”, señaló el Padre.
“Claro que vamos a seguir adelante, no se puede bajar los brazos, al contrario”, remarcó el sacerdote.
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