En el Depósito Judicial Automotor de Rosario, ubicado en Espinosa al 7400, en la zona oeste de la ciudad, se lleva adelante una quema controlada de vehículos secuestrados con fines de compactación.
Según informaron las autoridades, los incendios son intencionales y supervisados, y se realizan para reducir el volumen de los autos que no pueden ser ingresados a la máquina compactadora debido a las limitaciones de espacio.
El comisario Emanuel Luna explicó que algunos vehículos, como los utilitarios, no pueden ingresar físicamente a la compactadora por su tamaño y, por este motivo, se los somete primero a una quema parcial y controlada para facilitar el corte del material.
Además, afirmó que el operativo se lleva a cabo bajo la supervisión de bomberos, que controlan cada etapa del proceso para garantizar que el fuego no represente riesgo de propagación.
Estas tareas se desarrollan desde marzo de este año como parte de un plan provincial de limpieza y reducción de chatarra automotor, que busca liberar espacio en los depósitos judiciales. En este caso, se trata de vehículos del servicio penitenciario.
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