La discusión comenzó cuando algunos frentistas manifestaron su malestar por la presencia del contenedor frente a sus viviendas o locales. Sebastián, que trabaja en un depósito de la zona, aseguró que no se oponía a tener el recipiente en su ingreso siempre que no entorpeciera el trabajo diario y pudiera ser utilizado correctamente por los vecinos. "Es un contenedor que generó un conflicto entre los vecinos. Nosotros accedimos a que pueda estar sobre nuestro playón, para que no haya conflictos", explicó. Sin embargo, relató que la situación escaló cuando intentó mover el contenedor unos metros para permitir la carga y descarga de vehículos: "Esta gente vino, me empezó a agredir. Me dijo: 'Te voy a cagar a tiros, te voy a incendiar el galpón'. A mí me pegaron entre tres personas, tengo golpes y patadas en la cabeza".
Marcelo dio su versión de los hechos. Señaló que todo ocurrió el miércoles por la tarde, cuando llegó a su casa y vio el contenedor frente al pasillo de ingreso. "La municipalidad había marcado previamente dónde tenía que ir. Sale una persona del depósito y me empieza a insultar. Me empujó y me empezó a perseguir, a tirar puñetes. El le pega a mi señora", detalló. Marcelo afirmó que se defendió de la agresión y que también terminó golpeado.
Según relataron los protagonistas, la discusión por el contenedor ya venía generando tensiones desde hacía varios días.
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