Un preso en la cárcel de Coronda sumó imputaciones por haber extorsionado a comerciantes a quienes llamaba a través de un celular.
El detenido ya lleva una condena de seis años. Operaba con un celular desde su celda, y una mujer lo visitaba como su pareja y le daba información personal sobre las víctimas. Los hechos quedaron registrados entre noviembre del año pasado y comienzos de 2025. La justicia dispuso prisión preventiva para ambos.
El preso fue identificado como Nicolás Emanuel Amarilla de 26 años y lleva una condena de seis años de prisión efectiva impuesta en agosto de 2023.
El fiscal Rébola presentó escuchas telefónicas, entrecruzamientos de información y entrevistas como evidencia. Y pidió que Amarilla sea trasladado a la cárcel de Piñero, donde en teoría los controles son más estrictos y hay inhibidores de señal.
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