El animal nació con un trastorno que hizo que sus patas se doblaran en sentido contrario, por lo que era incapaz de caminar o ponerse de pie correctamente.
Veterinarios del zoológico San Diego Safari Park le salvaron la vida a una jirafa con aparatos ortopédicos especiales.
El tratamiento le permitió a Msituni unirse al resto de la manada de jirafas.
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