Rosario y la región
Durante la noche, continuaban las tareas en la fábrica incendiada de Corrientes y Viamonte
Fuego, humo, sirenas, corridas, evacuados. Un galpón completamente destrozado y el temor de los vecinos. Todo esto pasó en una fábrica de corchos ubicada en Corrientes y Viamonte. Por causas que aún se desconocen el inició devoró todo, pero al menos no hubo que lamentar heridos.
El fuego fue rápidamente controlado por bomberos de la ciudad y la región que se acercaron a colaborar. Destacaron que gracias al buen trabajo de enfriamiento las consecuencias son menores.
Mientras que en horas de la noche, continuaban las tareas de remoción en el inmueble siniestrado. Aníbal Gómez de Bomberos Voluntarios, Vanesa Jiménez de Bomberos Zapadores y Gonzalo Ratner de Defensa Civil hicieron un balance de los trabajos que se realizaban a la noche.
“La situación a esta hora está controlada, no está extinto el siniestro y continúan las tareas de remoción y de enfriamiento. Lo que está dificultando la tarea es que hay mucho material en polvo, es decir, el corcho en polvo, que no está compactado. Eso genera que, a la hora de moverlo, vuelva a tomar las llamas, por estar en estado incandescente. Calculamos entre 6 y 7 horas más de trabajo para la extinción completa del siniestro”, detalló Gómez.
Por su parte Jiménez, expresó: “Lamentablemente a veces el trabajo del bombero queda en la lupa porque los riesgos son grandes. Una cosa es lo que se ve adentro, lo que se trabaja adentro del incendio, con altas temperaturas y riesgos de caída de estructuras o de colapso. Hoy lo que nos ayudó mucho es que la estructura, al momento del arribo, ya había cedido prácticamente en su totalidad y eso nos permitió trabajar desde el interior del galpón y en forma coordinada. Se está extendiendo mucho el trabajo porque la etapa de retiro de escombros es muy complicada, ya que una parte se hace manual, otra con excavadora y a medida que retiramos los escombros se van generando nuevos focos”.
Finalmente, Ratner mencionó: “Se trabajó todo el día, se siguió monitoreando, no se esperó que se apague el fuego, los ingenieros de Obras Particulares del municipio estuvieron todo el día en cada uno de los domicilios linderos verificando las estructuras. Hay daños, la temperatura fue mucha. Pero en principio no hay riesgo de derrumbe, y eso es importante para llevar tranquilidad a los vecinos. Al no haber peligro de derrumbe se habilitó el regreso de los domicilios, el tema es el humo, hay linderos que la afectación por humo es importante, por eso en común acuerdo con ellos se decidió que vayan a la casa de un familiar”.