María Elena y Alberto, mostraron cada rincón de su casa que fue robada y vandalizada por los delincuentes. El miércoles por la noche, entraron a su casa, la cual están refaccionando y se llevaron lo que encontraron a su paso.
Ingresaron moviendo la tapa de una claraboya en el techo del baño. La robusta estructura pesa varios kilos de peso, pero esto no fue un impedimento. Una vez adentro con una escalera se armaron la salida perfecta.
Le arrancaron de las paredes varios artefactos, sacaron de los armarios herramientas, utensilios, recuerdos, resolvieron con el tiempo todo el lugar: “Rompieron la ventana, llevaron la grifería, la estufa el ventilador y una ventada de aluminio”, comentó María Elena.
“Tenemos que dar gracias que no estuvimos, porque si estábamos no sabemos si vienen armados y de la forma que pueden actuar”, agregó la mujer.
La pareja de adultos mayores, tiene 5 gatos y un perro. Esta mañana cuando entraron a la vivienda, los animales estaban alterados y fuera de la casa
Ahora no les queda otra que reforzar todos los accesos. Rejas, cerraduras, techo.
Pero para María Elena lo más triste no son las cosas que le robaron, sino la forma en la que estamos viviendo.
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