Desde hace tres semanas este inmueble ubicado en Cavia al 1300 casi Washington es el blanco de las balaceras. El martes 30 de marzo pasaron e hirieron a la propietaria de la casa, madre de Ema Pimpi Sandoval, muerto a tiros en 2019 y a su sobrino de cinco años y anoche ocurrió una nueva balacera cerca de las 20 hs.
A mediados de marzo la mujer había concedido una entrevista a Telefé Noticias tras un allanamiento policial en su domicilio, cuando una balacera tuvo lugar en su casa.
Vecinos de la zona apuntaron a una banda que vende droga en conivencia con la Policía. “La disputa narco que no tiene fin obliga a los vecinos a vivir encerrados”, comentan los vecinos indignados.
Ema Pimpi, tenía prisión domiciliaria en una casona de Barrio La Florida en el momento en el que fue ejecutado en 2019. Su familia sigue siendo noticia por las perforaciones de plomo que la atraviesan ante la mirada sórdida de los vecinos.
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