Este viernes 9 de mayo, la Catedral de Rosario fue el escenario de una misa especial para rezar por el nuevo Papa, León XIV. La ceremonia comenzó a las 19.30 y fue presidida por el arzobispo Eduardo Martín, quien convocó a fieles, parroquias y movimientos religiosos de toda la diócesis para acompañar con oración el inicio de este nuevo pontificado.
Desde temprano, muchas personas comenzaron a acercarse al templo. Algunos lo hicieron después del trabajo, otros llegaron con tiempo, pero todos coincidieron en la importancia de participar de este momento.
Una mujer oriunda de Perú, que asistió acompañada por una niña integrante de un grupo de danza folclórica, compartió su emoción al enterarse de que el nuevo Papa había sido parte de la vida religiosa de su país. “Enterarnos ayer que es nuestro Papa, porque él se presentó con el DNI peruano”, dijo conmovida.
En sus palabras, también recordó una frase que marcó a la colectividad: “Uno no es del lugar donde nace sino donde entrega el alma. Él entregó su alma en el Perú y creo que lo ha dejado muy bien dicho en su primer discurso”.
La mujer expresó además el orgullo de los inmigrantes peruanos radicados en Rosario: “Todos los peruanos que vivimos acá estamos muy emocionados. El que conoce sabe la calidez de toda la gente, y a nivel mundial sabemos de la gastronomía peruana. Él quedó muy enamorado de todo eso”.
Al ser consultada sobre los próximos pasos del nuevo Papa, no dudó: “Yo creo que su primer viaje va a ser a Perú. Va a ser tremendo”.
La mujer explicó que asistieron a la misa “encantados, para pedir por nuestro Papa, León XIV”. “Vinimos con la ropa tradicional del norte, donde él vivió: en Chiclayo, en Trujillo, en la selva peruana”, detalló.
Durante la ceremonia también hubo palabras de recuerdo y cariño hacia el Papa Francisco.
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