Rosario y la región
Sufrió un ACV y lo dejaron seis horas en una guardia: murió a los pocos días
Diego Gómez murió el 24 de octubre pasado en el Hospital Italiano de Rosario. Tenía 48 años, trabajaba en Terminal 6 y vivía con su familia en zona sur de San Lorenzo. Cinco días antes había sufrido un ACV y lo llevaron de urgencia al hospital provincial Granaderos a Caballo. Allí lo tuvieron seis horas en la guardia, aseguró su viuda Fabiana Brizuela.
La mujer que vive con sus hijos de 5 y 17 años -tiene otros dos mayores de edad- denunció malos tratos en la atención de su marido en aquella madrugada del 19 de octubre que ingresó con un cuadro de ACV. “Queríamos que nos atiendan bien y que tuviesen algo de empatía con el paciente y los familiares. Ellos podían haberlo ayudarlo un poquito más”, lamentó la viuda.
“No quiero que haya otro caso como Diego Gómez. No quiero que otros chicos se queden sin su papá y que otra mujer se quede sin su marido por la mala atención en un hospital”, planteó la sanlorencina entre sollozos. Y recordó que aquel 19 de octubre lo llevaron cerca de las 4 de la madrugada al Granaderos a Caballo. “Había tenido un ACV y no lo atendieron bien”, cuestionó.
Según la mujer, estuvieron en la guardia del hospital de San Lorenzo hasta cerca del mediodía, cuando los trasladaron en ambulancia al Hospital Italiano. “Le quitaban el oxígeno para ponérselo a otro paciente. El cuadro de mi esposo empezó a agravarse. Tenía dificultades para respirar y le golpeaba la puerta a la enfermera, quien se acercaba a verlo de muy mala manera. Como si fuera un perro que estaba tirado ahí. Me decía que tenía una respiración normal dentro del cuadro que presentaba”, manifestó.

Diego trabajaba en el área de limpieza de Terminal 6, en Puerto San Martín. Era diabético y sufría hipertensión. “Durante el ACV sufrió dos convulsiones. A la médica que lo atendió no tengo nada que reprocharle. Pidió que mi cuñado se quede en la guardia para ayudarla porque mi marido era grandote. Vomitó dos veces”.
El paciente permaneció entre seis y siete horas en el Granaderos a Caballo, confió Fabiana. “Después de unas cuantas horas lo trasladamos en ambulancia al Hospital Italiano. Allí directamente lo intubaron y lo internaron en terapia intensiva. “Lo sedaron y de ahí no salió más. Al quinto día falleció”, señaló apesadumbrada.
Reconoció la mujer que el traslado su marido a Rosario se demoró por falta de disponibilidad de camas. “Pero la negligencia empezó acá porque no se lo atendió como correspondía”, insistió Fabiana. “Cuando lo internaron en el Italiano ya tenía una hemorragia en el cerebelo con tres coágulos y con un infarto cerebral en el hemisferio izquierdo. Y el lado derecho también ya lo tenía afectado”, precisó.
Diego se descompuso en su casa de Barrio Bouchard, en zona sur de San Lorenzo. “Cuando estábamos en casa se le había afectado la parte derecha del cuerpo. Y cuando estábamos en el hospital veía que el ACV ya había empezado a afectarle la parte izquierda. Empezó a empeorarse acá y le pusieron una caja de almohada. Yo no voy a recuperar a mi esposo, pero tampoco quiero que le pase lo mismo a otra persona”, sentenció.
Por último, Fabiana consideró que desde la dirección del hospital Granaderos a Caballo no deben estar al tanto del caso de su esposo Diego Gómez. “Nunca me llamaron ni tampoco deben saber lo que le pasó. Hoy me pasó a mí pero no quiero que le pase a otra familia”, indicó antes de anticipar que ya cuenta con asesoramiento de abogados para realizar una presentación penal.