A partir de las medidas que adoptó, Sunchales logró amesetar la curva de contagios

En el decreto donde se inauguraron las restricciones en esta segunda ola de coronavirus en la provincia de Santa Fe, se les brindaba la posibilidad a localidades de profundizar medidas en caso de que la situación epidemiológica se atenúe. Sunchales fue una de las primeras en acudir a esto, restringiendo la permanencia en espacios públicos y cerrando locales gastronómicos a las 21. Gonzalo Toselli, su intendente, contó en Buen Santa Fe las consecuencias positivas que tuvieron. 

"Nosotros vimos, al analizar la curva de contagios y las proyecciones que solemos hacer, una proyección que nos preocupaba mucho. Así que tomamos medidas más restrictivas el 14 de abril. Vencieron el 27. Se relacionan con el horario de los lugares gastronómicos, que cerraron a las 21. Y también con actividades deportivas en espacios cerrados", comenzó diciendo Toselli.

Y señaló: "logramos una estabilización, una meseta alta de la curva. No creció más la cantidad de casos. Estamos en un promedio de 25 casos diarios: pero también, el área programática alcanza a otras 13 localidades más, que aportan unos quince contagios diarios más que se suman. Eso lleva a la cercana saturación del sistema de salud: en nuestro hospital tenemos 24 camas, de las cuales estaban ocupadas hasta anoche 19. Y tenemos un centro de críticos que hemos consolidado con doce camas con respiradores de las cuales están ocupadas 9".

"Si no nos hubiésemos dado este centro de críticos, la situación se hubiese desbordado. Nosotros podemos tener a 12 pacientes graves o críticos con respiradores y, si hubiera permanecido el sistema de salud del año pasado, estaríamos en una situación de desborde. Rafaela no podría recibir pacientes y en Santa Fe se está complejizando la situación", añadió.

Además, contó que la merma en la edad de los contagiados también se produjo en la localidad. "El rango etario mayoritario predominante es de 20 a 55 años con algunos cuadros muy severos, graves, que generan preocupación. La vacunación avanza, pero no al ritmo que uno esperase. Falta muchísimo para la inmunidad de rebaño que estamos esperando".

Retornando al efecto de las medidas, detalló: "nosotros hacemos un seguimiento cotidiano de los casos y también tenemos proyecciones, apoyándonos en científicos del Conicet. Cuando tomamos las medidas, la proyección nos daba que, si seguíamos así, íbamos a tener 35 casos diarios. En la última semana logramos amesetar e incluso bajar los casos. No es suficiente, porque quedan muy pocas camas libres. Tenemos que bajar. Tenemos perspectivas de estar mejor en junio, pero nos quedan 20 días bastante críticos. La meta es bajar los casos para que no tengamos esa situación tan límite en el sistema de salud".

Pese a que lograron una meseta, se vendrán nuevas medidas en la localidad "al menos hasta el 21, para ver si logramos ese espacio que nos permita estar un poco más tranquilos y no con esta situación tan límite donde nos sabemos si mañana vamos a tener camas".

"Nosotros podemos servir, de algún modo, para que sepan en otras ciudades, que cuando se toman medidas que sabemos que afectan a algunos sectores -que siempre buscamos sostenerlos-, nuestra experiencia nos dice que da resultado. Siempre lo hemos observado. La curva de contagios baja o se ameseta. Vamos a tener que hacer un esfuerzo la mayoría de los santafesinos por unos 15 o 20 días para ver si podemos mejorar la situación", cerró Toselli.

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