Información General
El día de furia de un repartidor
Las cámaras de seguridad de un edificio ubicado en San Martín al 1800 captaron el momento en que un delivery de helados tocó en reiteradas oportunidades el portero con el fin lógico de entregar el producto a quienes lo solicitaron.
Sin embargo, no lo obtuvo. Una y otra vez insistió y finalmente, después de siete minutos tomó una decisión, quizás inspirado en la película “Día de furia”, y descargó toda su ira contra el portero eléctrico, hasta romperlo. Las imágenes se viralizaron, y el propio Javier se mostró arrepentido.
"La primera ronda de pedidos la entregué bien y en la segunda me pasa lo que me pasó. Estuve tres minutos arriba de la moto, llamando por teléfono y no me atendieron. La mujer es bastante arisca y me dijo que no quería el helado y que no toque más timbre. Y ahí me salí del eje porque sentí que me faltó el respeto y me descargué con el portero", explicó Javier en declaraciones a El Noticiero de la Gente.
"La gente vio que agarré a piñas el portero pero no vio la cuestión de fondo. No sentí verguenza, me sentí raro al verme en el video porque no me acordaba que lo había hecho. Ahora voy a dejar pasar unos días para que se calmen las cosas y me voy a comunicar con los vecinos para hacerme cargo de lo que hice", argumentó.