Información General
Los chicos y la cocina: el aprendizaje completo
*Por Fabián Scabuzzo
Durante mucho tiempo la cocina era un territorio no apto para menores, ellos quedaban en la sala, en el jardín, pero nunca entre los platos y las ollas. Hoy ese concepto se ha desterrado y la cocina, y el cocinar con los niños y niñas, es una tarea que dará saberes útiles para toda la vida.
Marcela Bertoni realiza talleres de cocina on line para chicos bajo el nombre de “Chefcitos”, “Me divierto muchísimo en las clases, eso es por lo cual doy clase de cocina los niños, realmente compartimos y nos reímos y la pasamos súper bien”, nos cuenta.
La pandemia la obligó a suspender las clases presenciales y brindarlas por internet “Te digo sinceramente que antes de este año no me imaginaba estar dando clases de cocina online, era de las personas que pensaba que las clases tenían que ser presenciales, el desafío que me propuso el 2020 fue probar la virtualidad, y la verdad es que fue muy satisfactorio, el producto era bien aceptado, los chicos la pasan rebien, terminan aprendiendo de la misma manera que la manera presencial”
Cocinar mejora la alimentación
“Los chicos vienen a clase porque quieren aprender cocina, son chicos que desde chiquitos les ha gustado la cocina. El tema de jugar es algo que sumo a mis clases, hacemos chistes, bailamos y cantamos, festejamos un cumpleaños, hacemos un festejo patrio o demás, siempre de fondo está el aprendizaje, la receta, las prácticas que hay que cumplir y el juego es como la yapa” Nos dice Marcela, que como requisito dice que los chicos deben aprender cocina siempre al lado de un adulto, y eso mismo afirma la nutricionista Guadalupe Fortuna: “es importante que los niños aprendan a cocinar siempre acompañados de un adulto y que se acerquen a verificar, a conocer, qué alimentos, qué ingredientes, están involucrados en cada preparación. Los acerca muchísimo a una alimentación más saludable, con menos procesados”.
Los chicos eligen cocinar lo que suele tentarlos cuando van al fast food o al súper, nos cuenta la Chef Bertoni “piden muchas cosas dulces, y piden muchas recetas de los típicos productos que se consigue en el supermercado, prefritos, congelados, lo cual es maravilloso, porque después de clase aprenden a hacerlos de manera casera y saludable, y no los compran nunca más en un supermercado”.
En esta línea la nutricionista indica que, en el caso de niñas y niños que tengan que seguir una dieta resulta muy efectivo que tengan contacto con la elaboración de lo que van a comer: “Es importante que el niño se involucre en la cocina cuando tenga que hacer un plan de alimentación saludable para descenso de peso ,o si presenta alguna patología como diabetes, hipotiroidismo, que hoy se ven mucho en niños, la obesidad ha aumentado en los últimos tiempos notablemente. Que hagan su desayuno, su merienda, y de a poco se interioricen en la cocción de los alimentos , según las edades, y siempre acompañado de un adulto, que empiecen cortando su propio alimento, tratando de hacer por ejemplo un bizcochuelo, y que tengan la guía de su mamá, o de su papá, para poder estar más vinculados y tener adherencia a un tratamiento nutricional”.
Y los padres la pasan tan bien como los chicos, nos dice la Profe Marcela “Los padres están tan enganchados como los chicos, a veces veo a los padres a la par, o peleándose con los chicos por hacer la preparación, lo cual me da mucha gracia…La verdad que la relación y el vínculo que tenemos es hermoso”.

Aprendizaje para la vida
Es muy interesante el aporte de la licenciada en psicopedagogía María Florencia Romero: “Es una actividad que les puede aportar muchísimo, y les da un montón de herramientas para desarrollar a los niños, en cualquier edad” y nos explica: “El cocinar implica desde la elección de un plato, que se va a elaborar, la planificación de la receta que vamos a trabajar, la organización del tiempo y el espacio de lo que vamos a trabajar, también se enfrentan con dificultades y hay que ver cómo se resuelven, cómo se sortean esas dificultades. Desarrolla muchísimo la creatividad y la imaginación porque el niño puede ir y cambiar o modificar esa receta, o incorporar algún elemento o algún ingrediente nuevo, una decoración que a ellos les gusta (…)y para ellos es un orgullo. Por lo tanto también desarrolla la autonomía y la autoestima, y eso muy importante, otra de las cosas que se ven en la cocina es que se aplican unidades de medidas y cantidades, y eso también es un aprendizaje,(…) y desarrolla el trabajo en equipo también, ya que se reparten tareas, para llegar a un resultado en común”.
Nos cuenta que en la cocina de casa tenemos los dispositivos básicos del aprendizaje : “La atención, la concentración, también la memoria, la motricidad fina, todo lo referente a lo sensorial, a través de los olores, las texturas, los gustos, la resolución de problemas y el razonamiento, ver cómo solucionamos si se me cayó algo, si se quemó, si todavía está crudo, diferentes cuestiones que tengo que saber cómo lo puedo resolver”.
Romero aporta un detalle importante que se puede sumar a la actividad de cocinar con los chicos en casa: hacer las compras juntos “Es muy bueno que participen en hacer las compras, porque ahí el niño también puede optar y elegir qué productos se va a necesitar, conocer toda la amplia gama de productos que hay en el mercado, el manejo del dinero, todo el proceso de compra , con todo lo que eso implica también. Ahí se ve la responsabilidad que también el cocinar va a generar esa responsabilidad de comprar los ingredientes que necesito para poder hacer esa receta, elaborarla y tener el producto terminado”.
Vemos entonces que a los chicos cocinar los empodera, solo hay que tener cuidado con los cuchillos y los fuegos, por eso es importante que estén comandados por los adultos, con quienes se establece una relación que las pantallas no lo permiten. Un momento único que se llevará en el alma toda la vida. Y porque cocinar es amor, como dijo Bernard Shaw, “No hay amor más sincero que el amor a la cocina”.
(Las fotos 2 y 3 pertenecen a los talleres de Chefcitos que realiza Marcela Bertoni)