Rosario y la región
“Estoy bien vieja”: estremecedora balacera contra dos jubilados
Elba muestra cada una de las marcas que los impactos de bala dejaron en su casa. En la pared, en la ventana. Hasta el mantel de la mesa quedó agujereado por los proyectiles. Ella estaba parada en la puerta y vio absolutamente todo.
“Dos tipos iban en la moto, yo estaba parada en la puerta y mi marido acá adentro, vi que sacó el arma, era grande y negra y empezó a tirar. Me quedé parada, mirando, qué otra cosa iba a hacer”, comentó Elba.
Y seguido, agregó: “No lo sentí a mi marido y cuando vuelvo lo veo recostado en una esquina, creí que le habían pegado a él, y me dijo ‘estoy bien vieja’, mientras yo lo abrazaba desesperada. Fueron bastantes tiros”.
Fue una ráfaga de disparos delante de sus ojos. Entre 8 y 10 tiros. Ella quedó petrificada, inmóvil. Regalada a la suerte de los sicarios que evidentemente no quisieron matarla.
La gran angustia de Elba era que su marido estaba adentro y varias balas atravesaron la pared. Pero el destino tampoco quiso que José, su esposo, se transforme en una víctima. Las balas le pasaron cerca, pero no lo rozaron.
Este fue el segundo ataque que reciben en menos de un mes. La única sospecha que tiene Elba es que se trate de un mensaje para su nieto. Todos le recomiendan que se vaya, pero su nieto no vive ahí y ella no se resigna a tener que abandonar su propia casa.