Horror en Ludueña: lo bajaron atado de un auto y lo asesinaron a tiros

Alan Agustín Ferrari tenía 19 años y se convirtió anoche en otra víctima de las muertes con sello mafioso que abundan en Rosario. En la escena del crimen de pasaje García Manzo y Matienzo, en barrio Ludueña, levantaron siete vainas servidas calibre 9 milímetros y un precinto.

Los investigadores determinaron que el cuerpo de Alan Ferrari estaba atado con precintos a la altura de los brazos y presentaba heridas de arma blanca en la cabeza, golpes varios en el cuerpo y un presunto disparo de escopeta, precisaron voceros policiales.

Según testimonios ocasionales, a la víctima la bajaron de un auto con los brazos maniatados. El fiscal Ademar Bianchini, de la Unidad de Homicidios Dolosos, ordenó que el cuerpo de Alan Ferrari sea trasladado al Instituto Médico Legal para la correspondiente autopsia.

Los primeros en llegar a la escena del crimen fueron efectivos de Gendarmería, tras dar cuenta de que se habían producido disparos cerca de las 20.15 horas del viernes. Al llegar a García Manzo y Matienzo hallaron al joven sin vida, producto de los impactos de bala.

El fiscal Bianchini se hizo presente en el lugar en donde también trabajó el gabinete criminalístico de la Agencia de Investigación Criminal.