Rosario y la región
La voz del Papa Francisco ante la ola de violencia: el mensaje que le dejó a Rosario en 2024
Mientras Rosario llora la muerte del Papa Francisco, vuelve a cobrar fuerza el mensaje que el pontífice argentino grabó para la ciudad en marzo de 2024, cuando una serie de homicidios de trabajadores había sumido a la población en el miedo y la incertidumbre.
En aquel video, Francisco le habló a la comunidad rosarina, reconociendo el dolor vivido y llamando a una reconstrucción profunda desde lo social, lo político y lo espiritual. “En un momento de crisis, como los que vive la ciudad de Rosario, comprendemos la necesidad de la presencia de las fuerzas de seguridad para llevar tranquilidad a la comunidad”, expresó, aunque advirtió que “en el camino de la paz se deben transitar respuestas complejas e integrales”.
El mensaje fue recibido con fuerte impacto en la ciudad, y hoy, tras su muerte, resuena con una carga emocional aún más profunda. En su llamado, el Papa no esquivó responsabilidades: “Sin complicidades de un sector del poder político, policial, judicial, económico y financiero no sería posible llegar a la situación en la que se encuentra la ciudad de Rosario”.
La carta audiovisual también fue un llamado a la esperanza y a la acción conjunta. “Todos podemos colaborar y ser parte de los espacios deportivos, educativos y comunitarios. El temor siempre aísla y paraliza. No teman comprometerse junto a otros para ser respuesta pacífica e inspiradora”, sostuvo.
En sus palabras, el Papa también puso el foco en los sectores más vulnerables, pidiendo un esfuerzo común para atender a quienes están en riesgo: “Dado que, en todo sistema mafioso, los pobres son el material descartable, los invito a aunar esfuerzos para que el Estado y las instituciones intermedias puedan brindar espacios comunitarios en los barrios vulnerables”.
Concluyó su mensaje invocando protección espiritual: “La Virgen del Rosario intercede día y noche por todos sus hijos, sobre todo como suelen hacerlo las madres, con diligencia especial por quienes tienen mayores fragilidades”.