Rosario y la región

Los imputados por la muerte de David y Valentino pueden pasar hasta 25 años en la cárcel

Finalizó la investigación en la causa por la picada mortal de Ayacucho y Avenida del Rosario en la que murieron padre e hijo. Resta un informe pericial para que el expediente sea elevado a juicio oral. Hay dos acusados en prisión preventiva.
Por Telefe Rosario

Los imputados por la muerte de David y Valentino pueden pasar hasta 25 años en la cárcel | Rosario y la región
Rosario y la región: Los imputados por la muerte de David y Valentino pueden pasar hasta 25 años en la cárcel

Ya se encuentra terminada la investigación por la causa de David y Valentino Pizzorno, padre e hijo fallecidos por la imprudencia de dos automovilistas que corrían una picada en zona sur de Rosario. Así lo anunciaron desde el Ministerio Público de la Acusación.

Mientras tanto se espera de informe de pericia accidentológica para que los fiscales Valeria Piazza Iglesias y Walter Jurado, de la Unidad de Siniestros Viales, presenten la acusación a solicitud de la audiencia preliminar para elevar la causa a juicio oral.

Ambos imputados, Pablo M. y Germán S., permanecen en prisión preventiva efectiva por el plazo de ley desde la primera audiencia imputativa.

Durante el proceso se realizaron audiencias de apelación a la calificación legal que se les imputó y a la presión preventiva dictada. En todos los casos, se confirmó en Cámara lo expuesto por la Fiscalía en primera instancia.

La acusación se presentará por el delito de homicidio simple con dolo eventual en concurso ideal con lesiones. Se prevé una pena de 8 a 25 años de prisión efectiva. Al momento de presentar la acusación se dará a conocer el monto de pena solicitado por la Fiscalía.

La noche del 20 de marzo del año pasado, David Pizzorno (42 años), su esposa Cintia D. y su hijo Valentino (8) viajaban en un Citroen C3 que fue brutalmente embestido por un Renault Sandero que corría picadas por Avenida del Rosario y Ayacucho.

“Empiezo a seguirlo a Pablo porque no conocía el barrio. Comenzó a acelerar y no tomé dimensión de la velocidad. Sin ánimo de picar ni correr una carrera, perdí noción de la velocidad e iba atento a lo que él hacía. Lo estaba siguiendo para la casa", justificó Germán S. en la audiencia imputativa, tras salir de terapia intensiva por la brutalidad del choque.