Rosario y la región
Saquearon una capilla y una escuela: suspendieron sus actividades por falta de luz y agua
El robo ocurrió en barrio Tablada, en Uriburu al 100, y provocó graves daños y dejó sin luz ni agua tanto a la parroquia como a la escuela que funciona en el mismo predio. Las actividades quedaron suspendidas, como así también los dos comedores comunitarios.
Este lunes a la madrugada robaron y destrozaron la parroquia San Pablo, ubicada en Uriburu al 100, en barrio Tablada, y a la escuela con la que comparte el predio.
Según relataron testigos de la zona, un solo hombre fue el que efectuó el robo; habría ingresado por un tapial y, una vez adentro del establecimiento, provocó múltiples destrozos y se llevó griferías, caños, cables, sanitarios y bebederos. También desconectó las alarmas y las bombas de agua, lo que dejó al predio sin los servicios esenciales.
Como consecuencia del robo, este martes las instituciones no pudieron abrir sus puertas. Tanto la parroquia como la escuela quedaron sin electricidad ni provisión de agua, lo que imposibilita el normal funcionamiento y obligó a suspender las actividades, incluidas las de los dos comedores comunitarios que operan en ambas instituciones.
Una vecina de la zona afirmó que hace quince días la cuadra permanece sin luminaria, situación que, según los habitantes del barrio, contribuye a la inseguridad y facilita este tipo de hechos delictivos.
