ARA San Juan: dos tripulantes que bajaron del submarino en Ushuaia admitieron que hubo fallas técnicas

La jueza Marta Yáñez comenzó ayer en el juzgado federal de Caleta Olivia, a tomar declaraciones testimoniales en la causa en la que investiga la desaparición del submarino ARA San Juan.

Los primeros en ser interrogados fueron los dos tripulantes que se bajaron en Ushuaia, justo antes de que el submarino desapareciera con 44 de sus compañeros a bordo.

Entre sus dichos, admitieron que la nave había tenido desperfectos en sus itinerarios previos, incluyendo un problema en el snorkel, que después tuvo un fallo grave previo a la desaparición.

Los marinos Juan Gabriel Viana y Humberto René Vilte fueron sometidos a un interrogatorio de más de ocho horas, con el que se buscó reconstruir en qué condiciones estaba el submarino.

Luis Tagliapietra, padre de Alejandro, uno de los submarinistas desaparecidos y abogado de más de 20 familiares, participó de la audiencia y reveló que se refirieron a tres fallas técnicas puntuales.

"Viana mencionó que tuvieron un problema en los sensores de la válvula de cierre del snorkel. Como estaba muy sensible, se cerraba incluso ante la humedad. Así que tuvieron que calibrarlo manualmente", explicó a Clarín.

También describieron unos "ruidos en el casco" por la falla de una compuerta en el área donde circula agua para refrigerar los motores.

Pero Tagliapietra dijo que el desperfecto "más importante" fue que una bobina de las baterías que se quemó al llegar a Ushuaia, obligando a demorar la partida previa a la salida final.

30/01/2018