Desactivaron una fiesta ilegal con más de 300 adolescentes

Una fiesta no autorizada con más de 300 jóvenes fue clausurada en la madrugada del domingo en una vivienda de Tarragona al 200 bis, en Fisherton. La mayoría de los asistentes eran adolescentes y, tras la intervención de las autoridades, muchos debieron ser retirados por sus familias.

El procedimiento estuvo a cargo de agentes de la Secretaría de Control y Convivencia municipal junto con efectivos policiales, tras una denuncia vecinal por ruidos molestos.

Al llegar al lugar, los inspectores constataron la presencia de menores, música a alto volumen y venta de alcohol en una barra montada en el lugar. Según informaron fuentes oficiales, el evento se había organizado con entradas anticipadas.

En el operativo se secuestraron equipos de sonido y se labraron actas de infracción. Tanto los organizadores como el titular de la propiedad fueron notificados y deberán presentarse ante el Tribunal Municipal de Faltas.

El procedimiento se llevó adelante sin incidentes y no se registraron situaciones de violencia.