Rosario y la región
Detuvieron a un trapito en Parque Urquiza: tenía antecedentes y agredió a inspectores municipales
Detuvieron a un cuidacoches luego de que vecinos de la zona llamaran a la línea 147 para denunciar que el hombre les exigía dinero de manera extorsiva a quienes estacionaban en el lugar. Cuando personal municipal y policial se acercó para identificarlo, el hombre reaccionó con violencia.
“Cuando llegamos junto con la policía motorizada, quisimos identificarlo y la primera reacción de la persona fue agredir a los inspectores municipales y luego al personal policial”, explicó Diego Herrera, secretario de Control y Convivencia de la Municipalidad de Rosario.
Tras ser reducido, los efectivos constataron que el detenido estaba en libertad condicional, por lo que fue trasladado a la Comisaría Segunda.
Herrera señaló que el hombre actuaba “de manera agresiva y con maltrato verbal hacia los vecinos”. “Nos decían que era muy violento en su forma de hablar y de encarar a las personas”, agregó.
Durante el fin de semana, en el marco del evento de colectividades, se demoraron además a tres personas que intentaban cobrar una tarifa fija en zonas no habilitadas para el estacionamiento. “Tuvimos tres personas demoradas fuera del radio donde trabaja la cooperadora del Hospital Alberdi. Los vecinos alertaron enseguida y pudimos llegar al lugar y detener a esas personas”, detalló el funcionario.
Según explicó, el control se realiza en conjunto con la policía motorizada, especialmente en zonas aledañas al Parque Urquiza y al predio del Parque Nacional a la Bandera, donde se concentran los principales accesos al evento.
Herrera recordó que la actividad de los cuidacoches no está prohibida en Rosario, aunque tampoco se encuentra formalmente regulada. “Es una actividad que no está prohibida, pero tampoco quiere decir que esté permitida. Lo que sí está prohibido es la extorsión, el cobro de tarifa fija o el lavado de vehículos en la vía pública”, explicó.
Ante cualquier situación de maltrato o cobro indebido, el municipio recomienda llamar al 147 o al 911. “Cuando detectamos alguna de esas situaciones, se le labra el acta al cuidacoche o, si se puede comprobar la extorsión, se lo lleva detenido”, subrayó Herrera.
Por último, el funcionario reconoció que el fenómeno se repite incluso en ciudades donde está prohibido, y que muchos de quienes ejercen la actividad “lo hacen como una salida económica en contextos difíciles”.