Rosario y la región
La EPE identificó 78 casos con consumos excesivos y dio de baja a 1.506 usuarios
El Gobierno de Santa Fe profundizó los controles sobre la Tarifa Social tras detectar consumos elevados en usuarios que accedían al beneficio, con casos extremos que superaron los 7.000 kilovatios y subsidios por más de 17 millones de pesos.
La Empresa Provincial de la Energía (EPE) informó que, en el marco de los controles realizados, detectó unos 80 usuarios en Rosario con consumos desproporcionados en relación a la Tarifa Social. En la ciudad, se identificaron 78 casos con consumos superiores a los 3.000 kilovatios, incluyendo cuatro usuarios que superaron los 6.000 kilovatios. Uno de los casos más llamativos fue en barrio Belgrano, donde un usuario con Tarifa Social consumió 7.020 kilovatios, generando una factura parcialmente cubierta por el Estado que fue superior a los 520 mil pesos.
Durante septiembre, se detectaron 21 contribuyentes con consumos entre 2.500 y 7.000 kilovatios, generando facturas por un total de 17,1 millones de pesos. Los usuarios abonaron menos de 3 millones, mientras que la Provincia cubrió más de 14 millones en subsidios.
A nivel provincial, el Ejecutivo dio de baja a 1.506 usuarios del régimen de Tarifa Social que registraron consumos superiores a los 2.000 kilovatios, en un contexto donde el promedio de consumo en un hogar santafesino ronda entre 700 y 800 kilovatios. Entre los casos más extremos, 21 usuarios con consumos cercanos a los 7.000 kilovatios tuvieron facturas que superaron los 17 millones de pesos.
Asimismo, los controles realizados detectaron 258 usuarios en toda la provincia con consumos mayores a 3.000 kilovatios y cuatro casos en Rosario que superaron los 6.000. En los 82 casos de mayor consumo, el Estado provincial debió afrontar más de 52 millones de pesos en subsidios, mientras que los usuarios pagaron únicamente seis millones.
Desde la EPE, su presidenta Anahí Rodríguez afirmó que “los datos muestran que algunos sectores están desvirtuando el espíritu del beneficio” y aseguró que se redoblarán los controles para que la Tarifa Social “vuelva a ser un apoyo para los hogares vulnerables y no un subsidio encubierto para consumos excesivos”.
El ministro de Desarrollo Productivo, Gustavo Puccini, expresó: “Es inadmisible que se continúe este esquema. El beneficio está pensado para acompañar a las familias que más lo necesitan. No vamos a permitir que unos pocos vivos perjudiquen a la EPE y a quienes realmente lo necesitan”.
