Rosario y la región
Aberrante: abusó de su hija hasta embarazarla y pasará 20 años en la cárcel
La Justicia de San Lorenzo condenó este martes a Enrique Ricardo Juan Pochón a la pena de 20 años de prisión por abusar durante 13 años de su hija hasta dejarla embarazada, en aberrantes hechos ocurridos en barrio Villa Cassini, de Capitán Bermúdez.
El fallo de los jueces Griselda Strólogo, Eugenio Romanini y Jesús Rizzardi fue seguido con expectativa por la víctima -acompañada por hermanos, amigas y amigos y familiares maternos- y organizaciones de mujeres del Cordón Industrial que la acompañaron desde las escalinatas de Tribunales de San Lorenzo.
El fiscal Juan Ledesma, a cargo de la investigación desde que la víctima logró denunciar a su padre luego de 13 años de busos, manipulaciones y amenazas, había solicitado una pena de 30 años de cárcel para Enrique Pochón desde que lo imputó por los aberrantes hechos.
A fines de julio de 2019, Bianca denunció a Enrique Pochón luego de 13 años de abuso. Cursaba un avanzado embarazo como consecuencia de las vejaciones de su padre. La niña, llamada María Luz, nació en agosto de ese año y fue dada en adopción luego de los estudios de ADN que determinaron que era hija de su propio abuelo.
En el juicio quedó acreditado que Pochón la había obligado a Bianca a inventar una historia sobre un encuentro amoroso con un tal Javier, un inexistente chico entrerriano que estudiaba la misma carrera que ella en Rosario y de quien -según la versión pergueñada por el abusador- la joven había quedado embarazada.
Con ese relato, Pochón procuró infructuosamente ocultar 13 años de abusos, tormentos y manipulaciones. Hasta que su hija le contó la verdad a su madre Lorena y juntas realizaron la denuncia en Fiscalía de San Lorenzo.
Abusó de su hija durante 13 años bajo amenazas de muerte y la dejó embarazada. Este martes lo condenaron a 20 años de cárcel por aberrantes hechos ocurridos en Capitán Bermúdez. pic.twitter.com/Mb0AThAsuB
— Telefe Rosario (@teleferosario) April 13, 2021
Lorena era sostén económico de familia. Realizó trabajos informales y residencias hospitalarias hasta que se recibió de técnica en hemoterapia para llevarle sustento a sus cinco hijos, entre ellos Bianca. Su ex pareja, Enrique Pochón, aprovechaba el prolongado tiempo que la mujer pasaba fuera de casa para perpetrar los abusos, refiere la investigación.
"Cuando escuché la condena pensé en esos 20 años en que voy a vivir tranquila, así que espero que se cague muriendo ahí adentro”, expresó la víctima de 23 años a la salida del fallo.
Bianca dejó un mensaje para aquellas víctimas de abuso sexual que no se animan o no pueden contarlo. "Espero que este caso sirva para que muchas chicas más puedan hablar. Siempre voy a estar para quién quiera. Agradezco a los jueces que me creyeron", finalizó.
