Sin transporte: el drama de los discapacitados

Teresa tiene a cargo dos personas con discapacidad,  su hermano y su hijo. El hijo, quien tiene retraso madurativo, puede ir todos los días a un Centro de Día porque tiene una obra social que se lo permite, pero su hermano, quien sufrió meningitis de niño, es afiliado de PAMI y desde hace un tiempo le recortaron las visitas al Centro, desde hace un tiempo  sólo va dos veces por semana. Esta historia es una de las tantas que refleja las consecuencias de la crisis que afecta al sector que presta servicios a las personas con discapacidad donde no pueden afrontar los costos para cumplir con su función, producto de la creciente inflación en relacion con  los aranceles que reciben del gobierno nacional. 

Teresa dice que el corte de este servicio: "Le hace daño a él porque empeora su estado de salud y a mí porque tengo que estar para ellos las 24 horas del día", explica , quien afirma que muchas veces ellos quedan solos: "Al no ir retrocede en sus avances y se va olvidando de las cosas", lamenta la mujer.

Discapacidad en estado de alerta

Instituciones que trabajan con personas con discapacidad alertan sobre la situación de crisis que afecta al sector y que obligara a un corte involuntario del servicio que llega a más de 200 mil personas con discapacidad en todo el país y donde trabajan alrededor de 150 mil profesionales.

Ante la desesperante situación convocaron para el próximo 31 de enero una movilización en Buenos Aires para entregar un petitorio al presidente Javier Milei con las urgentes necesidades que tiene el sector.